martes, 8 de mayo de 2012

No quiero un Principe, quiero un Plebeyo




Sábado por la noche, después de una agotadora semana de mucho trabajo y conflictos internos (que no valen la pena mencionar), me cambié y me perfumé para tener una "double date" con una de mis mejores amigas, mi Mama y mi hermanito.

La fila parecía interminable pero, Manuel (mi hermano) quería palomitas y refresco y tuvimos que hacerla. Un señor de repente se infiltró delante de mí y en cuestión de segundos me dio su pedigree : divorciado, dos hijos y como dijo el textualmente "poco manociado", me dio su business card y se ofreció pagar la cuenta (claro después de ver que ya yo había pasado mi credit card) típico del hombre que quiere impresionar !

Katherine (mi amiga) y yo estábamos so excited por ver la movie de la que la mayoría de nuestros conocidos hablaban y de la que todos ya habían posteado uno que otro comentario en su muro en facebook.

Debo admitir que me reí bastante con la película y estuve de acuerdo en algunos postulados de los que se plantearon en el film. No haré una síntesis de lo que trataba y mási bien daré mi perspectiva acerca de la parte con la más me identifiqué.



"Think like a Man" narra diferentes historias de un grupo de 6 amigos que se reunía con frecuencia para jugar basketball y obviamente hablar del "común denominador" entre ellos: Mujeres. Había uno que estaba a punto de divorciarse, otro era un Casanova y quería incursionar en la industria musical y el protagonista de mis post "El soñador" que se había mantenido cambiando carreras y era excelente chef pero, no había conseguido la manera de que eso le generara dinero.


Del otro lado estaban las féminas... una divorciada y con un hijo, otra decepcionada en el amor y la que será nuestro conejillo de indias "La autosuficiente" una mujer independiente , con su propia casa, CEO de una importante empresa, en fin sumamente exitosa.

Voy a centrar mi atención entre los últimos descritos en los dos párrafos anteriores: el soñador y la autosuficiente. Se conocieron por accidente en el restaurant donde el soñador trabajaba como camarero, pero, en esa ocasión se hizo pasar por alguien adinerado. Ambos se sentían atraídos, el estaba impresionado con su belleza y ella había encontrado el primer hombre que no le hablaba de negocios o trabajo, con el que no sentía la necesidad de ostentar nada, simplemente había una chispa, un imán magnético que los mantenía unidos.

Esta mujer descubrió en el soñador algo inverso a lo que tenían los hombres perfectos que llamaban su atención, los mismos que al final terminaban trayendo temas de trabajo a la comida o hablando de marcas y lugares de moda. El Soñador logró abrir su propio negocio y después de que la autosuficiente lo había literalmente dejado, se apareció en medio de la inauguración a pedirle perdón (como dirían en buen dominicano a pedir cacao) #Fin. ... y fueron felices para siempre. 

Créanme si les digo que antes de escribir esta entrada revisé algunos artículos previos que había publicado , específicamente aquellos en lo que hablaba del amor. Después, de mucho pensarlo y de analizar mis experiencias en la materia, confieso que muchos de mis fundamentos cayeron en la sala 9 del Broadway Cinema y se quedaron justo ahí luego de que encendieran las luces y pasaran los créditos.

Admito que por mucho tiempo he sido Miss. Standard, siempre en busca de lo perfecto, lo más cercano al ideal de los cuentos de hadas, por lo menos en el amor. A lo mejor mañana cambie de opinión, pero, hoy ya no quiero un príncipe quiero un plebeyo, quiero a alguien real de carne y huesos, con defectos y debilidades, pero, que esté dispuesto a luchar por mi y que su único objetivo sea mantenerme a su lado. Alguien que sea capaz de cambiar por su propia cuenta, a quien pueda motivar, ayudar a crecer...

Así que si tienes esa persona que realmente ha esperado por ti, no cambies al jugador, cambia la jugada y recuerda que el amor no existe se construye. Ambos diseñen y escriban su propia historia, no a tu parecer o a tu imaginación sino al gusto, agrado y voluntad de Dios.

En el post pasado lo confirmé la vida es dura y las experiencias son los mejores profesores para aprender, leer e interpretar lo que realmente tiene valor en cuestiones del corazón. He aqui mi pregunta : Is there such thing as a perfect man?. Ustedes mismas se responderán. Una vez más en la lucha, nunca conformándonos con poco, con nada menos de lo merecemos, pero, valorando que más que el hombre perfecto buscamos alguien que pueda permanecer a través del tiempo, que este en las buenas y en las malas, que perdone nuestros errores, que lo pueda, lo soporte y lo espere TODO.

Vean la movie y claro me dan luego su opinión.

Generis 29:20: "Aso sirvio Jacob por Raquel siete años; y le parecieron pocos dias, porque la amaba".


Bendiciones infinitas,


Chanel Fdez 











2 comentarios:

  1. Asi es, tengo una bendición en casa, no es de la realeza pero aún asi logra que lo ame con todo mi corazón, tiene muuuchísimas virtudes y unos que otros defectos, lo más importante es que me cuida, mima y respeta como si la de la realeza fuera yo!!!!! jajajajaja así la vida tiene sentido y se torna del color que más nos gusta!!!

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  2. Espero siempre tus post! me encantan!!!

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